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23 de agosto de 2017

EL CINE MONDO


Una película mondo es básicamente un filme documental de compilación, hecho con pequeños fragmentos y secuencias de distinta índole, algunos de los cuales tratan sobre un continente y otros sobre una materia específica. Algunas veces los directores utilizan material rodado por ellos mismos , y otras veces los filmes son montados incluyendo material de noticias antiguas. La composición de fragmentos y escenas sueltas, implica la presencia de un narrador necesario y útil para guiar al espectador a través de los diferentes escenarios. Aspecto relevante del género mondo es su contenido "didáctico", y lo bizarro la crudeza y lo sangriento de supuestas escenas auténticas, que en muchos casos son reconstrucciones.


Mondo Cane (1962) ,película de Gualtiero Jacopetti y Franco Prosperi (Jacopetti venía del periodismo y Prosperi era un prestigioso biólogo) , supuso una novedad respecto de lo visto anteriormente, que, utilizando técnicas y efectos del documental etnográfico o antropológico , con imágenes inéditas y de archivo ,presentaba  una sucesión de actos y de gestos humanos y animales de todo el planeta,  a veces curiosa, a veces desagradable, a veces sorprendente, a veces hilarante y a veces terrible, que daría origen a un género que sería conocido como Cinema Mondo.
Mondo Cane, tiene un altísimo componente de crítica, de reflexión filosófica, incluso de poética sobre la endémica locura humana. Muchos críticos tacharon esta película de racista y colonial y también criticaron a sus autores por “recrear” y “maquillar” muchas de las escenas. Esto último nunca lo negaron, aduciendo que en cualquier documental, para qué engañarnos, se recurre en mayor o menor medida al pacto o preparación. Por otro lado, basta ver la película para comprobar que el tratamiento general dista de ser racista al tratar de poner a todos los hombres por igual en su absurda y violenta cotidianidad, aunque inevitablemente gran parte de las imágenes en que aparecen sociedades tribales tienen un fuerte tufo colonial. Pero esto tiene más que ver con la época, que con una postura narrativa, la película no trata de desprestigiar al “salvaje”, si no más bien golpear al “civilizado” donde más le duele: en la comparación rotunda y categórica de sus aberrantes costumbres con las del otro menos civilizado, el indígena, el hombre de la tribu, el salvaje.
Mondo Cane comienza con imágenes de un acto en memoria de uno de los primeros grandes mitos del cinematógrafo y uno de los mitos del siglo XX, el actor italiano, emigrado a América, Rodolfo Valentino. Este comienzo, que ya arroja un elemento comparativo de las mitologías actuales, las de los ídolos mediáticos, con la propia concepción de mitología, o con las creencias “paganas” de los pueblos extranjeros. A partir de ahí la película comienza a saltar de una cultura a otra, del África Negra a Occidente, islas del Pacífico, Norteamérica, mostrando como mientras en un restaurante de China o Vietnam devoran un cachorro recién sacado de su jaula, en San Francisco, unos desconsolados ancianos entierran su mascota en un bucólico cementerio canino. Matanzas de animales en ceremonias de kula o Potlach son salteadas con imágenes de encierros taurinos o automutilaciones por devoción en algún pueblucho de la Italia ultracatólica. Nadie se salva de la mordaz crítica global.
Teoría y práctica del documental MONDO CANE
La película además incluía como  tema musical principal "Ti guarderò nel cuore (More)2 , escrita por Ritz Ortolani y Nino Oliver con letras de Norman Newell, que se hizo enormemente popular y fue nominada al Oscar. 

A Mondo Cane ,que fué un gran éxito de público y taquilla , le seguiría "Mondo Cane 2 " (1963) de Gualtiero Jacopetti y Franco Prosperi, con más sexo y menos violencia que la primera entrega.


El éxito de crítica y público de Este perro mundo llevaría al cine italiano a estrenar una gran cantidad de películas similares, centrados en la violencia y el sexo: Mondo caldo di notte (1962), de Renzo Russo, que mostraba lo perniciosa de la realidad nocturna mundial, con aparición de mujeres públicas y otras actividades prohibitivas; Mondo sexy di notte (1962), de Mino Loy, que contaba con la participación de Ursula Dors como complaciente stripper; La donna nel mondo (1962), que tenía la particularidad de que estaba dirigida por los mismos autores de Este perro mundo, Gualtiero Jacopetti, Paolo Cavara y Franco Prosperi, ofreciendo todo un recital de comportamientos sexuales contemplando el papel de la mujer en la sociedad actual; e Il pelo nel mondo (1964), de Antonio Margheriti y Marco Vicario, que contenía una inquietante muestra de lucha libre femenina donde lo que menos importaba era quién resultaba vencedora.


Uno de los mejores títulos en este sentido resultó ser Suecia, infierno y paraíso (Svezia, inferno e paradiso), de Luigi Scattini (1968), una coproducción con Inglaterra y la propia Suecia donde, por medio de una narración de Enrico Maria Salerno, se nos ofrecían todas las perversiones que estaban teniendo lugar en esa época en dicho país escandinavo. Así, bastante alucinado, el público podía contemplar los primeros rodajes pornográficos, clubs privados para lesbianas, los primeros locales de intercambio de parejas, el sexo libre en las comunas hippies, lo rápido que se iniciaban las adolescentes en los placeres carnales y las fiestas de sexo. Todo ello aderezado por una dinámica banda sonora de Piero Umiliani que compuso la divertida canción Mah Nà Mah Nà.


La desaparición de la censura, a finales de los años 60, fue un aliciente más para que estos documentales se hiciesen cada vez más perniciosos y tomasen licencias excesivas en cuanto a mostrar lo más sádico y obsceno de las sociedades, surgiendo así títulos como: America così nuda, così violenta (1970), de Sergio Martino, sobre casos sexuales y comportamientos agresivos ocurridos en Estados Unidos; Questo sporco mondo meraviglioso (1971), de Mino Loy y Luigi Scattini, que, como su título indicaba, indagaba en lo más bello y sucio del planeta; I vizi segreti della donna nel mondo (1972), de Silvano Secelli, que demostraba que las mujeres de todo el mundo eran unas viciosas que solo buscaban sexo ; Magia nuda (1975), de Sergio Catiglioni, Guido Guerrasio y Alfredo Catiglioni, centrado en actos de muerte en Sudamérica y otros de canibalismo africano; Hombres y tiburones (Uomini e squali, 1975), de Bruno Vailati, donde un tiburón le arranca la pierna a un individuo; y Mondo di notte oggi (1976), de Gianni Proia, que seguía los recorridos sexuales del pionero Mondo di notte.

Curiosamente, varios de estos documentales fueron estrenados en España con gran aceptación de público y el anagrama " S " en su cartel anunciador, para advertir al público que «esas películas, por su temática o contenido, podían herir la sensibilidad del espectador»   

VÍDEO: El género más polémica del cine 
 

Fuentes: http://www.cinefania.com / Cine insano-  Luis Miguel Carmona- T&B Editores                                                                      

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