Los silabarios eran como la cartilla escolar, los Cuadernos Rubio o cualquiera que sea hoy su equivalente: el instrumento escogido para que la virginal mente del niño fuese aprendiendo a leer y de paso se enterase de cómo es el mundo que le aguardaba.
Entre ellos se encuentra el Nuevo silabario pintoresco para los niños, del último tercio del siglo XIX, poco dado al eufemismo y muy lejano de la corrección política actual,que elige palabras que oscilan entre lo crudo, lo cotidiano y lo extravagante . Las clases sociales, los prejuicios, las categorías, la autoridad, el premio a la obediencia y el castigo al insumiso, el aprendizaje de la paciencia, el lugar de cada uno, .... , expresado en cuarenta y seis viñetas y en otros tantos pareados no menos regocijantes y asombrosos.
Entre ellos se encuentra el Nuevo silabario pintoresco para los niños, del último tercio del siglo XIX, poco dado al eufemismo y muy lejano de la corrección política actual,que elige palabras que oscilan entre lo crudo, lo cotidiano y lo extravagante . Las clases sociales, los prejuicios, las categorías, la autoridad, el premio a la obediencia y el castigo al insumiso, el aprendizaje de la paciencia, el lugar de cada uno, .... , expresado en cuarenta y seis viñetas y en otros tantos pareados no menos regocijantes y asombrosos.
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Fuente: https://eldesvandelabuelito.wordpress.com
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